no estás en el camino equivocado

Muchas veces no sé como confiar en lo que hace la vida.

A veces pienso que las cosas se desacomodan para comprobar si es que realmente ese sigue siendo su sitio. Tal vez hay cosas que tienen que desordenarse para que podamos ver si todavía siguen siendo nuestras.

Porque lo que ocupa espacio y no nos pertenece en realidad solo estorba. Lo que pasa es que no sabemos qué hacer con el vacío. Y es que no puedes asumir que la forma en que -miras- y sientes este desorden es la forma que tiene en realidad, ni tampoco que así va a ser como termine por acabarse.

Mira que la vida da tantas vueltas que te marea al punto en el que te sorprende dónde y cómo decide situar las cosas. Después de todo también aprendes a acostumbrarse al desorden y entonces logras convencerte de que fue así desde un principio.

El problema es que tratamos la vida como si fuera una línea recta cuando en realidad se parece mucho más a esas carreteras que te hacen vomitar.

Puedes decidir, pero ese es sólo es un primer paso. Así es como funciona el dominó. Puedes acomodar las fichas para que caigan según la forma que quieras darles, pero al momento en el que tumbas la primera, no puedes controlar la caída del resto.

Y nada se desacomoda porque sí.

Pero tal vez esa es una forma que la vida tiene para hacerte ver que lo cómodo quizás no siempre es lo mejor para ti. Habrán desastres que son peores que otros, pero ninguno tan terrible como para que no puedas ponerte al frente.

Así que no creas que tener miedo es una señal de que estás en el camino equivocado.

La indiferencia sin duda lo es. El miedo, por otro lado, quiere decir que estás tratando de ir hacia algo que anhelas, o que de pronto primero tiene que sanar. Eso ya lo sabrás tú.

Lo mejor que puedes hacer creo que es dejar de preguntarle a la vida el porqué. Cada quien tendrá que acomodar sus cosas en el momento que lo necesite, y eso no significa que debas creer que es el mejor.

A veces es necesario abrir la puerta, dejar que el viento entre y desordene lo que tenga que desordenar. Ya verás que hay cosas que a pesar de todo conservan su sitio.

Acuérdate de que lo que encaja, no siempre quiere decir que pertenece.

te quiero,

-g

---

¡Gracias por leer ¿Aló?!

Si quieres unirte a este mundo de introspección creativa lo puedes hacer a través de este link.

-lunatintaypluma